El Android Alter 3 conduce una orquesta sinfónica

Dicen que el director de una orquesta es el espíritu de esta. Hace pocas semanas os enseñamos a un robot sacerdote budista llamado Mindar. Si llamo tu atención, ahora te vas a sorprender mirando cómo el robot humanoide Alter 3 actúa sin una batuta ni partitura, dirigiendo a una orquesta en la Academia de Artes escénicas de la ciudad Sharjah.

Alter 3 es un androide con rostro, manos y brazos que aparentan a los que poseemos los humanos. Entre sus principales propiedades destacamos su grado de inteligencia que le conceden dirigir una orquesta sinfónica y hasta cantar en la misma.

Señal de las capacidades que están adquiriendo los robots inteligentes es como Alter 3 ha logrado dirigir a la ópera Scary Beauty de Keiichiro Shibuya. Esto se ha conseguido mediante la fusión de la tecnología robótica y la IA con el arte.

El mismo compositor japonés Shibuya comprende que el empleo de androides en todos los terrenos de nuestra sociedad es imparable, desde la Automatización Industrial hasta la robótica Educativa. El grado de inteligencia con el que se está aportando a los androides será quien dictamine hasta dónde pueden conseguir llegar y qué trabajos desarrollarán.

Kotobuki Hikary, el responsable de Alter 3, afirma que él puede tomar sus propias decisiones durante el espectáculo. Miembros del público indicaron que les gustaban más los directores humanos. Esa respuesta en sí es todo un triunfo, ya que el hecho de compararlos dice del desarrollo que la robótica está sufriendo.